Desde el 2021, aún con los coletazos de la pandemia vigentes, Carolina y su equipo de trabajo decidieron apostar a que todos los vecinos y las vecinas de Ezeiza puedan tener al alcance de la mano una alimentación más saludable, cuidando el bolsillo y con la misma rapidez con la que se pide una pizza o una hamburguesa por delivery.
El crecimiento que tuvo Blessing, un emprendimiento que comenzó con el reparto de productos de dietética, fue progresivo. Primero, se incorporaron algunos alimentos elaborados que Carolina cocinaba de manera casera para ella y su familia y luego, a principios de este año, la apertura del local ubicadosobre la calle Escalada 63, a pasos de la cancha de Tristán Suárez.
En un mano a mano exclusivo con Ezeiza Hoy, su fundadora contó cómo fue el camino de emprender y qué proyectos tiene a futuro para transformar la manera de nutrirse, apostando por una vida más sana y natural.
-¿En qué consiste tu emprendimiento?
Principalmente a lo que apuntamos desde Blessing es a cambiar la alimentación en Ezeiza, nada más ni nada menos, para que todos los habitantes puedan contar con una opción de comida rápida pero saludable. Nosotros somos el primer lugar del distrito que hacemos comida sana para el consumo directo. Lo que queremos es expandir esta idea y por eso vendemos productos veganos, vegetarianos, sin tacc, entre otros. Por tal motivo estamos trabajando con una nutricionista que está instruyendo al equipo para poder ofrecer una propuesta no solo saludable, sino también apta para los que tienen alguna condición como diabetes o celiaquía, mientras que también comenzamos a implementar en el menú opciones keto para aquellos que llevan adelante esa dieta.
-¿Cómo nació Blessing?
Arrancó en agosto de 2021. Hasta ese entonces trabajaba de empleada para una fiambrería pero no me sentía cómoda en el rubro, siempre tuve empleos en los que administraba locales para terceros que de hecho me sirvieron de experiencia para hoy saber cómo manejar mi propio negocio. Todo lo que en su momento hice por mis jefes hoy lo hago por mí y por mi equipo de trabajo. La idea de la alimentación saludable surgió como algo netamente personal porque yo no me venía sintiendo bien con lo que consumía, cada vez que pedía comida nunca encontraba una opción para poder afrontar ese cambio que estaba haciendo con mi alimentación. En cuanto al negocio en sí, empecé con el reparto de frutos secos, después amplié a productos de dietética y con todo lo que comercializaba, también cocinaba para mí y de a poco me largué a vender comida elaborada. Hacía todo yo, compraba, cocinaba, repartía, hasta que un día llevé a mi hija a la escuela sin mochila y me di cuenta que no podía con todo sola. Así surgió este equipo de trabajo que hoy es Blessing.
-¿Cuántas personas lo conforman?
Actualmente somos cinco. Abrimos todos los días, menos los domingos, de 10 a 15 y de 19 a 21 con repartos hasta las 23. Tres están en la cocina, hay una repartidora y yo que me encargo de todo lo comercial, somos un grupo muy sólido. Los que componemos Blessing venimos de trabajos anteriores donde no hemos sido tratados de la mejor manera, pero acá no hay cargos jerárquicos; si bien yo empecé con el proyecto, somos una organización horizontal con integrantes que se apoyan recíprocamente para trabajar de la mejor manera posible y eso se nota en los resultados.
-En redes han publicado que están con muchos proyectos para este año ¿Cuáles serían?
Queremos básicamente que la marca se expanda. Que todos tengan la posibilidad de alimentarse bien y de vivir mejor. El proyecto más cercano es la apertura de un restaurante y casa de té que nos permita atender al público de manera personal y también brindar un espacio para la implementación de terapias de sanación que no solo sean a través de lo que ingerimos. Tenemos en claro que nuestro cuerpo es un envase que hay que cuidar, ya que sin él no podemos disfrutar de la vida en general. Vamos a impulsar terapias como reiki, yoga y terapia floral. Otro proyecto es poder dentro de este mismo espacio realizar reuniones, cumpleaños de chicos y grandes, festejos con temática saludable, así como también generar un espacio de lectura para todos aquellos que quieran comer algo rico que los nutra y de paso leer y estudiar en un ambiente de tranquilidad.