
Tras el empate 1-1 ante For Ever en el norte argentino, Gabriel Di Noia dejó de ser el entrenador de un Tristán Suárez que sigue comprometido con el descenso.
La noticia causó sorpresa no por el rendimiento de Suárez, mal hace meses, sino porque esta vez no se puede hablar de un mal resultado. Tristán Suárez igualó 1-1 en su excursión al norte argentino ante Chaco For Ever, resultado que no sirvió para que Gabriel Di Noia continúe al frente de la institución.
La semana pasada Ezeiza Hoy anticipó que un mal resultado en el norte podía ser el detonante final para la salida de Di Noia. Sin embargo, pese a acumular 12 encuentros sin victorias, el empate no le cayó mal a un Lechero que al menos le sacó un punto más a Villa Dálmine, quien hoy perdería la categoría en forma directa.
El ciclo de Di Noia en el albiazul cerró con un saldo de cuatro victorias, seis empates y nueve derrotas, es decir, un 31,6% de los puntos obtenidos. Un balance flojo muy lejano a aquel prometedor arranque con tres victorias en fila.
Sin Bergessio y con Dátolo en el banco, Tristán se puso en ventaja en su visita a Chaco con el gol de Montenegro. Sin embargo, en el octavo minuto de descuento Silva igualó para el albinegro.
En el segundo tiempo el conjunto chaqueño estuvo un poco más cerca de la victoria pero Tristán resistió para sumar una buena unidad en un reducto difícil, ante un rival que también pelea en la zona baja de la zona B.
La derrota de Villa Dálmine, que hace todo por irse al descenso directamente, le permite al equipo del distrito sacarle dos puntos de ventaja pero aún se mantiene en zona de desempate para no irse a la B metro.
La dirigencia comunicó oficialmente que decidió la no continuidad de Gabriel Di Noia. Un entrenador que suena para llegar al Lechero es Mauricio Giganti, de último paso por Atlanta. Como Nardozza el año pasado, quien llegue deberá levantar a un plantel con pocas respuestas para evitar que la pesadilla termine de la peor manera.























