
Tristán Suárez lo ganaba en Villa Crespo pero se durmió y se volvió con las manos vacías. El equipo del distrito sigue a dos puntos de la zona de descenso.
Las tres victorias consecutivas obtenidas tras la llegada de Gabriel Di Noia al club trajeron una bocanada de aire fresco por Ezeiza y la ilusión de pelear arriba. Sin embargo, ese veranito parece difuminarse y los problemas han vuelto a aparecer, con apenas una unidad obtenida de las últimas nueve. El descenso vuelve a acechar.
En la noche de Villa Crespo, Tristán Suárez cayó 3 a 2 ante Atlanta. Tras un arranque parejo, Bedoya abrió el marcador para el local a los 15 minutos y pasó a manejar las acciones durante esa primera etapa.
Sin embargo, el Lechero salió con otra cara del vestuario y rápidamente igualó las acciones a través de Paolo Impini; el defensor ex Juventud Unida de Gualeguaychú convirtió nuevamente tras un centro de Dátolo para desatar la alegría en la delegación visitante.
Como si fuera poco, seis minutos después el Pato Núñez clavó un golazo al ángulo para adelantar al albiazul. La confusión del bohemio era total, pero una gran desinteligencia en el fondo de Tristán le permitió a Dramisino igualar a los 20 minutos con un remate que pegó en el palo y luego entró pidiendo permiso.
Atlanta agarró envión y aprovechó para golpear nuevamente a los 26 con una gran definición de Galeano por encima del arquero. El partido se hizo de ida y vuelta, pero el resultado no sufrió más alteraciones.
Suárez perdió nuevamente y lleva tres partidos sin alegrías. La victoria de Ferro hizo que quede solo un punto por encima del verdolaga, último hoy en jugar un desempate para no descender, mientras que Chaco For Ever está solo dos puntos por debajo.
El próximo domingo, Tristán recibirá al duro Racing de Córdoba con el objetivo de volver a sonreír y despegar de la zona baja de la tabla.























