
Mientras el termómetro durante toda la semana marcó cifras cercanas a cero, Ezeiza se despertó cubierta por un manto blanco de escarcha que transformó a sus calles y campos en un paisaje digno de una película nórdica. La ola polar que azota gran parte del país se hizo sentir con fuerza en esta zona del conurbano bonaerense, conocida por ser una de las más frías del Gran Buenos Aires.
Según informó el Servicio Meteorológico Nacional (SMN), se esperan que continúen temperaturas mínimas bajo cero durante varios días más, acompañadas de heladas intensas, especialmente en las zonas rurales. La sensación térmica en Ezeiza llegó a rozar los -5°C en las primeras horas del día, dejando autos, pastizales y techos completamente cubiertos de hielo.
Pese al frío extremo, muchos vecinos aprovecharon para capturar las mágicas postales que dejó la helada: árboles brillando con cristales de escarcha, campos blancos al amanecer y hasta charcos congelados.
El SMN recomienda abrigarse bien, evitar cambios bruscos de temperatura y tomar precauciones ante la presencia de hielo en calles y veredas. El invierno llegó con todo, y Ezeiza, como siempre, lo recibió con su clásico aire gélido... y ahora también, con un toque de belleza polar.























