El presidente de Laboratorios Richmond, Marcelo Figueiras, informó que la actual planta tiene capacidad para realizar la formulación y envasado de dosis pero aclaró que la producción estará sujeta a la cantidad del principio activo que envíen desde Rusia.
El Fondo Ruso de Inversión Directa (RDIF, por sus siglas en inglés) notificó a Richmond que el Centro Gamaleya (desarrollador de la Sputnik V) dio el visto bueno a las muestras enviadas de los primeros lotes que fabricaron el pasado mes de abril, requisito más que primordial para dar inicio con la producción a escala.
"Si todo sale bien la producción comienza la semana que viene; en este momento están fermentando en Moscú el principio activo del componente 1 de la vacuna y en cuanto terminen lo mandan para acá", expresó el titular del laboratorio ubicado en Pilar.
Asimismo, mencionó a un medio digital que "si Rusia envía la materia prima y logramos empezar la semana que viene, para antes de fin de mes podríamos tener las primeras 500 mil dosis en la calle, siempre y cuando no haya demoras en el transporte, los controles de calidad, etc, que son factores que no dependen de nosotros".
Esa cifra es la cantidad que la actual planta del laboratorio tiene capacidad de producir semanalmente, aunque el proceso actual que realizan consiste en la formulación, filtrado y rellenado de viales (envasado), la cantidad que se elabore finalmente dependerá de la materia prima que se se envíe desde Rusia.
Por su parte, Filgueiras resaltó que “una vez finalizada la producción se realizará el control de calidad tanto en el laboratorio como en el Instituto Nacional de Medicamentos (Iname) de Argentina y en el Gamaleya pero las dosis fabricadas quedan acá, por lo que Argentina se ahorraría tener que ir a Rusia a buscarlas".
Lo que respecta al proceso de producción la planta llevará adelante la formulación, filtrado y rellenado de viales (envasado) un proceso complejo y técnico con requerimientos exigentes de prácticas de manufactura.
En cuanto a esto, el Presidente de la compañía dijo: "Este proceso no es un `embotellado` simple, requiere un conocimiento técnico y científico de mucha complejidad y de mucha importancia e implica el trabajo de muchos profesionales tanto para la producción como para el control; es decir, no es un proceso mecánico o tecnológico simplemente, es un trabajo científico".