Un mínimo de 8 vasos diarios de agua, reducir el tamaño de los platos, ingerir sandía, melón, frutillas, tomates y lechuga, que tienen alto porcentaje de agua (92%) y evitar las gaseosas y las bebidas alcohólicas son algunos de los tips ante el calor extremo.
Un golpe de calor puede producirse si la temperatura del cuerpo alcanza los 40ºC o más, algo que en jornadas como la de este viernes es algo factible. A raíz de ello, cuidar la alimentación y la hidratación pasan a ser aspectos relevantes para evitar pasar un mal momento.
Ahora bien; ¿Sirve cualquier líquido para hidratarnos? ¿Qué comidas resultan más efectivas y por qué? Laura Fantelli Pateiro, Magíster en Nutrición (M. P. 35) y miembro de la Comisión directiva de la Sociedad Argentina de Cirugía de la Obesidad (SACO), explicó: “En días como los que estamos atravesando, para poder disfrutar las vacaciones de verano y sentirnos livianos en horas de trabajo, nuestra dieta debe incluir frutas y verduras bien lavadas (por su gran contenido natural de agua), leches, yogures y agua potable”.
Se consideran alimentos con bajo contenido en agua: la miel (20%), el pan (35%), un contenido medio las carnes (65%) y de alto contenido tanto la leche como el yogur (88%), sandía, melón, frutillas, tomates y lechuga (92%), entre muchos otros.
Siete consejos a tener en cuenta
1. Las niñas y niños deben beber agua; las gaseosas no deben estar diariamente en la mesa, sólo en ocasiones importantes.
2. Motivar a que toda la familia desayune junta, oportunidad para incluir frutas, jugos naturales y licuados.
3. Involucrar a los niños en las preparaciones de bebidas o platos saludables, como una ensalada de frutas.
4. Incluir verduras en todos nuestros almuerzos, cenas y frutas entre comidas o postres.
5. Utilizar jugos, licuados y yogures como opciones frescas y ricas en agua durante las horas de la tarde, en un club o en la pausa en el trabajo.
6. Tomar como mínimo 8 vasos diarios de agua. Llevar una botella en la mochila o cartera e ir recargándola en cada dispenser. Evitar las bebidas alcohólicas.
7. Hacer ejercicio a diario. Nada mejor que empezar o terminar el día con algo de movimiento para renovar energías.
Ante la consulta de cómo evitar un golpe de calor, la nutricionista indicó: “Debemos disminuir la exposición al sol, usar ropa de colores claros, sombrillas y sombreros. Evitar permanecer en lugares cerrados, y sí en ambientes ventilados, tomar agua con mayor frecuencia, aun cuando no se sienta sed, evitar la actividad física fuerte, prestar atención a signos de alerta como sed intensa y sequedad en la boca, temperatura mayor a 39º C, sudoración excesiva, piel seca, agotamiento, mareos o desmayo, dolores de estómago, falta de apetito, náuseas, dolores de cabeza, entre otros.
Asimismo, subrayó que "los jugos y licuados de frutas caseros son una opción saludable y nutritiva por su aporte de líquidos, vitaminas, minerales y fibras”.