El superhéroe del distrito atraviesa un momento difícil y analiza seriamente abandonar sus tareas solidarias que llevan alegría a niños y niñas.
Matías Cayuela(42) es un personaje ilustre del distrito. Conocido como el “Capitán Ezeiza”, se dedica a realizar tareas solidarias que incluyen donaciones a merenderos, comedores y espacios donde miles de chicos y chicas reciben su ayuda, además de disfrutar de su personaje ideado luego de que una vez le prestaran un disfraz del Capitán América, lo cual lo llevó a reemplazar su denominación final por el nombre de su querida ciudad.
“No tengo movilidad y estamos perdiendo donaciones por no tener cómo ir a retirarlas”, relató Matías a Ezeiza Hoy. Según afirmó, desde el comienzo de la pandemia, y a través de su gestión, siete provincias recibieron su ayuda con comida, juguetes y diferentes elementos de gran utilidad, como fue el caso de una cama ortopédica que le donó el Hospital de Niños de La Plata y que fue enviada a Corrientes.
También, en los últimos días el capitán Ezeiza gestionó un andador y un audífono que ya fueron enviados a Posadas. Sin embargo, la situación económica actual hace que Cayuela este sin trabajo (el cual perdió antes de la pandemia), a lo cual se suma que la única ayuda con la que cuenta es de la gente.
“Hay ocasiones en las cuales pongo plata de mi bolsillo para que las donaciones lleguen a destino, y la única ayuda que tengo es de la gente, ningún funcionario nunca se ha acercado a darme una mano y creo que no les costaría hacerlo”, sostuvo.
Esta semana, el Capitán Ezeiza manifestó en sus redes su deseo de abandonar, muy a su pesar, su actividad. A partir de allí, una catarata de mensajes de apoyo inundaron sus perfiles para pedirle por su continuidad: “No tenía idea de la magnitud del personaje y de la gente que está atrás”, indicó.
Mientras se replantea cómo seguir, el Capitán no para en su ímpetu por ayudar, y se encuentra en plena gestión para enviar a Misiones un cargamento con ropa, alimentos, calzado, pañales e insumos médicos. Para solventar algunos gastos, Matías vende en la calle barbijos de cirugía, ropa para hospitales y difusores de ambientes.
El próximo 14 de agosto, el Capitán Ezeiza cumplirá diez años de vida y solidaridad. “A veces pienso que no tiene sentido bajarse del barco a tan poco de cumplir un aniversario tan importante”, finalizó el encargado de hacer sonreír a miles de chicos en todo el país, y cuya tarea es digna de admirar.